lunes, 28 de mayo de 2012

ENVÍA MESAJE AL 5555


Hay muchos programas (por no decir casi todos) que permiten mandar mensajes para que la gente pueda comentar en vivo y en directo lo que piensan del tema.

Es fácil y lo tenemos al alcance de la mano: envía mensaje al 5555 (el número que sea). Yo no sé vosotros, pero a mi me pasa que no puedo parar de leerlos. Y a veces en lugar de prestar atención al programa, estoy pendiente de lo que dicen en los mensajes. Si eso le pasa a mucha gente, no sé si es realmente beneficioso para el programa (seguro que económicamente hablando sí, de eso no hay duda). 

Pero si analizamos los mensajes, llegamos a una conclusión: la gente es idiota. No todos, estamos de acuerdo, pero hay gente que le gusta hacer el payaso por donde puede. Hay que ser burro para poner algo como: "Lucas te quiero". A ver, ¿cuantos Lucas hay? ¿y uno pretende que el tal Lucas se dé por aludido? Y si lo tienes al lado, ¿por qué no se lo dices en lugar de gastarte el dinero por un mensaje que aparaecerá 3 segundos? 

No me digan que es romántico, es cutre. Supongo que también estará el que después de mandar el mensaje a la tele, le manda uno al interesado: "Lucas, mira la tele. Hay un mensaje para ti que aparecerá en breve". Y el pobre Lucas, aunque tenga una necesidad imperiosa de ir al baño, clavado delante del televisor a ver si lee el mensaje durante no sé cuanto tiempo, por que no debe ser rápido esto de que aparezca el mensaje que mandamos, digo yo. ¿No era más fácil mandarle el mensaje directamente? 

El colmo de los colmos, son los mensajes que no se entienden. ¿A quién se le ocurre mandar un mensaje pagando más de lo habitual, para que no se entienda nada de nada. Con tantas abreviaturas, algunos se pasan y no se sabe qué están intentando escribir. La inutilidad escenificada. 

Luego está el que opina de otro tema... Oiga, si es un programa deportivo, no nos cuente cosas de la cocina; si se trata de política, no ponga lo mucho que se divierte con su peña de petanca. A lo que vamos señores, a lo que vamos. el público del programa será gente interesada en el tema del programa, es lógico. 

También hay algunos muy graciosos. Por ejemplo, un mensaje que leí el otro día: "Cristina, quiero irme a dormir ya." Me hizo gracia, la verdad. El pobre chico supongo que desesperado por irse a dormir y habiéndoselo comunicado ya directamente, decidió mandar un mensaje a ver si la chica se daba por aludida. 

Y también tenemos los pervertidos: "Voy caliente y quiero sexo". Gracias por la información machote. Cambia de canal y busca lo que necesites para calmar tu sed, no estás en el lugar adecuado o eres un poco raro. Pero que ganas de gastar tiene la gente y qué solos que están por favor...

En fin, como distracción y análisis está bien. Pero las conclusiones a las que llegamos son un poco deprimentes...

viernes, 11 de mayo de 2012

Aquí no ha pasado nada...

Llevo unos días un poco torpe. A parte de mi fatal caída, las cosas siguen acercándose a mi con peligro...

Ayer (solamente ayer) me pasó lo siguiente:

1.- Fui a pasear el perro por la mañana. De repente el perro decide hacer un giro direccional y se me lleva con él... Resultado: caída en medio de la calle, del bordillo de la cera al suelo, aterrizando con rodillas y con manos. 

Mi primera reacción: levantar la cabeza; no me ha visto nadie. 
Segunda reacción: control de daños. Estoy entera, sólo me escuece un poco...
Tercero: Aquí no ha pasado nada, me levanto como si los segundos anteriores no hubieran existido... Patético. El perro me miraba en el suelo con cara de desconcierto... Será posible. 

Ahora tengo las rodillas como un niño en verano: peladas... Justo ahora que llega el buen tiempo y que a una le dan unas ganas tremendas de volver a ponerme los vestidos que tanto tiempo han estado encerrados. Siempre pasa igual cuando sucede lo mismo...

2.- Preparo una comida. Un trozo de la comida cae en la paella con aceite, que salta y aterriza en mi mano. Dolor. Lo dejo y me pongo agua fría. No ha pasado nada, pero horas después me escuece. No soporto los fritos.

3.- Estoy haciendo el cambio de ropa invierno-verano (este sol ya no creo que desaparezca bruscamente). Los zapatos también. Me doy cuenta que tengo tres veces más zapatos de verano que de invierno. Eso me gusta. los dejo todos bien puestos en el suelo. Me tropiezo con ellos. No una vez, no: ¡tres! 

No ha habido daños tampoco.

Conclusión: tengo una extraña atracción. No sé qué pasa que los objetos vienen a mi. Eso no puede ser bueno. O sí... Tendré que pensar en espacios o actividades en las que pueda sacar provecho de ello. 

Como medida cautelar, he pensado en forrar todos los peligros que existen por la casa como si tuviera un bebé... Esas esquinas llenas de protecciones antiestéticas cubriendo fantásticos muebles de diseño pueden ser mi salvación hasta que esta racha desaparezca...

En realidad me da bastante miedo. ¿Saben ustedes la estadística de muertes por accidentes caseros? Yo tampoco, pero si recuerdo que una vez lo leí, y eran más de 3.000 personas anuales. ¡Qué miedo! Realmente debo prestar más atención a lo que hago...





sábado, 5 de mayo de 2012

ADQUISICIONES PIJAS: redecorando mi espacio exterior.

Como podemos ya medio afirmar que el veranito se acerca, me ha invadido un oleaje de "quiero que mi terraza y mi jardín estén apunto". Así que he decidido comprarme unas cositas para que esté mejor. 


Lo primero que he comprado es un conjunto de platos para el exterior. Y siguiendo las tendencias del momento (y las mías propias, que mis amigos ya les sonará este color del año pasado), los he escogido verdes. Sí, el verde da alegría y me une con la naturaleza. Combinados con los blancos que ya tengo quedará súper mono.

Lo segundo que he decidido comprar es un detallito para la mesa: unas velas falsas. Sí, suena un poco mal, pero no se le puede llamar de otro modo. Son unos puntos de luz para la mesa o para una copita en el sofá después, porque se transportan con total facilidad. Un amigo, creyó que se podía encender un cigarro con ello... Sin comentarios...

Me gustan porque no puede haber accidentes indeseables con ellas, ni tampoco se apagarán con un  poco de viento. Los cargo antes y listos, es el detalle final sin cables (como odio los antiestéticos cables por todos lados...) ¿Verdad que son bonitos? Creo que voy a comprar un par más para regalar. Yo sólo os pongo una foto, si queréis ver más, haced click aquí

Y finalmente, para mi piscina, me ha entrado por los ojos un banco/luz/quémonoes... La culpa ha sido de la foto... Yo ya no pretendía comprar más, pero claro... Son estos detalles lo que hace que una casa quede estupenda... Y es que esto de comprar online es lo que tiene; una entra y empieza a mirar páginas y páginas... Y se va enamorando de varias cosas... Y al final he caído a la tentación: se llama BLOB, y ya forma parte de mi paisaje. Era necesario. Sin ninguna duda.

Y ahora estoy buscando algunos detalles más... Lo que me trae de cabeza son las plantas... ¿Qué plantas me recomendáis? Necesito algo que tenga flores, que no sean amarillas y que no sea muy delicado... ¿Alguna sugerencia? La jardinería es un mundo que desconozco bastante...

También necesito soluciones anti abejas... Lo digo por si alguien sabe de algún remedio...








jueves, 3 de mayo de 2012

LOS GORRONES

Hace mucho tiempo, cuando fumaba cigarros normales (no es que ahora fume cosas raras, fumo unos puritos de vainilla que me encantan), había un tema que me agobiaba mucho: el gorrón de turno.

De hecho, lo de ser gorrón es todo un arte. Hay quién no tiene gracia en ello, pero hay quien le pone mucho empeño. Pero al final, siempre se les cuelga una etiqueta.

El gorrón siempre es aparentemente un "despistado" o "perezoso". Hay frases tan típicas como: "Me das un cigarro? Es que se me han terminado..." o "Me das un cigarro? Es que me da una pereza levantarme para ir a buscarlo..." y siempre detrás tenemos la frase de: "después te lo devuelvo". Eso siempre hay que decirlo, así uno no queda como lo que es. Con los después te lo devuelvo montaría un estanco hoy en día...

Porqué hay gente que esto le pasa una vez, y no pasa nada. Pero acostumbra a pasar que siempre son los mismos los que "se les termina" o se lo "olvidan". Y es porque saben que podrán ser unos gorrones sin problemas. Y ese es el fallo. Porque si yo soy capaz de planear lo que voy a fumar, el otro también. Y por tu cara, yo no voy a tener tabaco para luego. 

Hay que echarle mucho morro. Pero aun había encontrado casos más fuertes... "¿Me das un cigarro?" "no tengo, lo siento, me los he olvidado." Y entonces van y se sacan el paquete del bolso... Parece grotesco, pero es verdad. Lo he vivido, y no una vez, mil. Y me pasó el otro día. Una chica que hacía tiempo que no veía, salió del restaurante igual que yo a fumar y cuando ve que enciendo el mío suelta: "Ostras es verdad, que tu ya no fumas cigarros... voy a buscar uno que los tengo en el bolso".

Me quedé a cuadros. Me lo dijo sin tener ningún pudor. Ella ya tenía planeado fumar de mi tabaco. Y encima va y me lo comenta... maravilloso. Evidentemente, esto es aplicable a mil cosas en la vida: agua en las excursiones, dinero para pagar la cuenta que se divide, etc. 

Alguna vez he hecho cuentas: realmente se ahorran una buena cantidad de dinero al año... ¿Qué deben hacer ahora que hay crisis? 

Pero debemos buscar el lado positivo: hay empresas que muy conscientes de lo que pasa, han inventado sistemas anti gorrones: unas bolsas de plástico con moho para que no se coman nuestro almuerzo, por ejemplo. O poner petardos en los cigarros. Así no querrán coger vuestros cigarros...