lunes, 29 de julio de 2013

ESOS PRIMEROS SÍNTOMAS DEL EMBARAZO

Cuando leí acerca de todos los síntomas posibles cuando estás embarazada pensé que sería un tema peliagudo y duro. Pero por suerte para mi, no estoy sufriendo vómitos ni mareos, ni cosas demasiado extremas.

Cuando la gente me pregunta: "¿Y qué tal te encuentras?"; yo contesto con alegría: "muy bien, sueño y bastante hambre pero nada más". Es entonces cuando por alguna razón extraña en la mayoría de los casos cae aquello de: "bueno, ya llegarán los síntomas". 

Incluso ahora, a puertas de finalizar el tercer trimestre de embarazo, que en teoría es cuando los síntomas bajan, me sueltan esta frase. ¿Es que no puede ser que tenga un embarazo normal y sin demasiadas complicaciones? Claro que no todo el mundo dice esto, al menos hay algun@s que se alegran por mi. 

Pero hablando de síntomas: sí tengo sueño, mucho sueño. Es un síntoma placentero. Siempre me ha costado horrores dormir. Soy una persona nocturna, me gusta trasnochar. De hecho, durante la noche es cuando mi cerebro da lo mejor de mi. Pues ahora esto ha cambiado por completo: a partir de las once  de la noche un tren de bostezos se apodera de mi y no puedo parar. Esto en alguna cena que hemos hecho me deja en un compromiso. Odio bostezar delante de la gente. Incluso cuando uno intenta bostezar disimulando sin abrir la boca acaba pareciendo como si estuviera mordiendo un limón. Caras comprimidas y músculos que no pueden evitar moverse desfiguran toda la cara. Pido disculpas siempre, que remedio, pero me deja incómoda a más no poder. Pero el sueño que estoy viviendo es tan potente que he llegado a quedarme dormida en una silla.

Mis días de trasnochar han desaparecido y en cambio, me levanto más temprano que nunca con un hambre voraz. Necesito comer, desayunar inmediatamente. Los que me conocen muy bien saben que eso es rarísimo en mi. Yo no he desayunado nunca. Ya sé que está mal, muy mal. A lo mejor estos meses me crean un hábito y apartir de ahora desayuno, quién sabe....

Otro de los síntomas más populares: los antojos. A ver, antojos sí tengo, pero no del tipo: "si no como esto me muero". Son del tipo: "me apetece mucho y si puedo me lo como". Si no, pues que le vamos a hacer. En concreto me ha dado por unos cuantos alimentos: aceitunas (me las comería a todas horas), ensaladas y queso. Cosas raras... También me apetecen mucho los iogures, que es lo más extraño de todo. Mi madre ha sufrido largas luchas conmigo toda la vida para que comiera un iogur. 

Y luego el tercer síntoma, ese sí que no lo puedo negar: mis pechos de tamaño normal están creciendo y endureciéndose como dos globos. No estoy acostumbrada a estos escotes, la verdad, pero me hace gracia. Será temporal así que hay que disfrutarlo. De pronto mis invisibles pechos han pasado a ser comentario de varios. Un pequeño comentario no me molesta, pero cuando es insistente les rompería la cara.

Obviamente me he comprado varias cremas, aceites y todo lo que he leído que es bueno para la piel. Por lo que he visto, no parece que sea del todo obligatorio comprar una crema específica para el embarazo. He comprado aceite de almendra, rosa mosqueta y una hidratante de almendra. Y procuro aplicármelas cada día, auunque cierto es que en alguna vez me la olvido...

Pero no todo es tan perfecto. De vez en cuando tengo algunos dolores abdominales, como si fuera a venir la regla y ya empiezo a comerme la cabeza que si algo va mal, que si estos dolores no son buenos, etc. De hecho, creo que nunca me había comido tanto la cabeza como con este tema... Sólo espero acabar de cumplir este trimestre y estar tranquila.


No hay comentarios:

Publicar un comentario