domingo, 22 de enero de 2012

PRINCESAS DE PASEO.

Ayer fuimos de fiesta. Me refiero que la noche acabó en una discoteca. Hacia mucho tiempo que no pisaba una y la verdad, nada ha cambiado.

Primero fuimos a un restaurante. En la mesa de nuestro lado se sentaron tres parejas jóvenes. Ellas iban vestidas con prendas que les resaltaban la figura (muy guapas las tres) y también peinadas de peluquería (o sea, súper puestas). Un maquillaje más que notable, perfumadas y con una manicura perfecta. 

Princesitas de paseo. Y sus Príncipes, bien engominados, todos con el corte de pelo similar (bien cortito) y con camisas con dos botones desabrochados. Eran parejas, esto estaba clarísimo, pero lo curioso es que se sentaron los tres chicos juntos y las tres chicas juntas. En una mesa redonda nadie queda aislado de conversaciones, pero ellos marcaron distancia entre ellas y ellos. No lo entendí. 

La verdad hay que decir que cantaban un poco. Supongo que porque eran mucho más jóvenes del público habitual del local. Pero nada que decir oye, uno va a cenar dónde quiere. Lo que fue realmente penoso fue cuando empezaron a comer.

Los modales en la mesa no es lo suyo... Esas princesa que muestran una fachada femenina se viene a bajo para descubrir la realidad de su ser: unas carencias en la mesa que dejan sin aliento. Comer con las manos ya está mal, pero chuparse los dedos luego ya es el colmo (y encima con ruido). Lo de cerrar la boca cuando masticas, tampoco lo conocían. Y la guinda del pastel fue cuando una de las chicas (no pude ver las otras) se sacaba trozos de comida de los dientes con sus súper uñas de manicura. 

Pobres niñas, con lo monas que son y lo que han aprendido a maquillarse y luego les das un tenedor y un cuchillo y no saben por dónde empezar. Es una pena la verdad. Estas chicas eran muy guapas. Y seguro que ellas no veían como un problema su manera de hacer las cosas. Es una pena que todo su encanto desapareciera con sus actos. 

A lo mejor en lugar de hacer algunas clases que no sirven de nada se podría incluir una de modales en público. Así daría menos asco, estar al lado de unas personas que hacen ruido cuando mastican, se chupan los dedos y luego buscan restos entre los dientes. Menos maquillaje y más educación.



No hay comentarios:

Publicar un comentario